27 marzo 2009

El poncho de Frida

En su mente ya había un boceto de horror. Pero no entendí ni pico. ¿De qué lado estás?
En fin. Estás limpio, pero te cubres la cara con algo de barro para parecer diferente, ni siquiera para igualarte al resto, a nosotros, los cara-sucia, sino para alejarte hacia el otro extremo, ese que te exige un poco más de 'esto' para estar allí y que, sin embargo, siempre debiste haber tenido la cara limpia alguna vez, ojalá con mechitas rubias.
Es como comer pan con jamón por 17 años.
"No quieras ocultar que has pasado sin tropezar", pero tampoco trates de sacarle provecho ostentado que eso te evitó las trancas y te creó inteligencia emocional y te ayudó a ser feliz y a ayudar a serlo. No te llenes la boca con filosofía cara porque te estás endeudando, porque te estás consumiendo, porque vas a mil por hora y en esa curva -que yo ya la pasé pero nunca lo reconocerás- te puedes sacar la cresta.
¿Te acuerdas de esa casa fea que no era más que la casa más linda?
Bien, acuérdate que ya no creo en las casas.

(No es lo mismo arte que hartar)

http://masielzagal.blogspot.com/2008/10/desconfianza.html

No hay comentarios.: